Propuesta Plaza Mayor Jaca

Jaca, Huesca

2018

Concurso de Arquitectura Richard H. Driehaus.

El origen del trazado urbano de Jaca, y su paulatino crecimiento, ha posibilitado que algunas manzanas no se hayan colmatado totalmente, por lo que todavía es posible encontrar diferentes espacios libres en el interior de las manzanas, con usos como jardín e incluso en algún caso como huerto. Entre estos espacios, destaca el interior de la manzana 13.612. Ha conservado una mayor cantidad de estos espacios, si bien es cierto que muy fragmentados y divididos por diferentes muros, creando así una pequeña red de espacios privados.

El reto ahora es unir estos espacios creando un nuevo espacio público que además debe integrarse en la red de espacios libres de la ciudad y no quedar aislado dentro de la edificación existente. La primera operación es la liberación del espacio ahora ocupado por los huertos y construcciones auxiliares en desuso. De esta manera se produce un gran vacío, que queda limitado por los edificios. Sin embargo es un lugar vacío, desprotegido, sin escala ni límites ordenados. Nos fijamos en el recorrido del sol, que marca dos zonas, una soleada y otra más sombría, y dos espacios resguardados de mañana y tarde. También el viento, del norte (la ‘raca’) que barre el espacio si es muy grande.

Todo ese espacio rescatado ha de conservar el carácter de libre, de ‘hortus’ hasta donde sea posible. Por ello se definirán espacios de transición, patios y jardines para los edificios ya existentes. Estos edificios, aunque en la actualidad presentan sus fachadas a las calles exteriores, pueden también participar de la plaza y además sanear, airear y potenciar sus viviendas y locales. Para que este espacio se convierta en una plaza es necesario dotarla de unos límites claros, de unos bordes reconocibles. Por ello se disponen en el perímetro diferentes edificaciones. Son volúmenes que quedan limitados por la alineación marcada para la plaza, los edificios existentes, los jardines y espacios de transición. También con las diferentes alturas de cornisa que quedan recogidas en la normativa.

La mayor parte de la plaza queda como un espacio libre, plano y vacío. Un espacio para ocupar, para jugar, para realizar actividades. El pavimento delimita una zona, ligeramente desplazada y protegida de aproximadamente 1.000 metros cuadrados en el que el protagonista es un pavimento de loseta que reproduce parcialmente un motivo eminentemente ligado a la historia de Jaca. Este espacio servirá para reunirse, para los juegos de los niños, para las actividades de la ciudad, como marco para las diferentes fiestas. Solamente tres mástiles de iluminación en el perímetro se suman al espacio. Estos elementos permitirán además la colocación de un elemento tensado que proporcione protección y sombra en los días de verano, evitando un sobrecalentamiento del espacio y favoreciendo la ventilación de la plaza y las viviendas.